Los ángeles caidos - Gordon Lindsay
sábado, 27 de junio de 2009
La Biblia declara que en el principio Satanás, entonces llamado Lucifer, era un ser sin pecado y justo. El registro habla de la integridad y justicia originales del gran arcángel con estas palabras,"Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad" (Ezequiel 28:15). Es difícil para nosotros comprender que esta criatura malvada, ahora el archienemigo de Dios y del hombre, en un tiempo fue un ser santo, y guardián del trono de Dios. Que él fue un objeto de la confianza divina, un arcángel a quien se le confió una gran autoridad, y que por un tiempo descargó sus deberes sin falta alguna y en obediencia perfecta a Dios. Que, lejos de ser un adversario de Dios, él era "querubín grande, protector" (Ezequiel 28:14), cuyos hechos y conducta estaban por encima de toda sospecha, y que gozaba de la confianza de Dios a tal grado que el cuidado del cielo estaba confiado en sus manos.
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9:24 a. m.
Etiquetas: Doctrina, Gordon Lindsay, Guerra espiritual, Libros, Predicadores notables, Teología
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